En el día a día una persona se encuentra
en situaciones de relaciones humanas a responder. En unas está en una posición
inferior (pej, un empleado ante un empresario o a veces un ciudadano ante la
Administración), está a un nivel equivalente (ej: amistad o compañeros de
trabajo de mismo grupo profesional o entre vecinos, etc) o está en un nivel
superior; pero en todas ellas se puede conversar desde la asertividad, que
sería un repertorio de conducta interactiva orientado a
resolver situaciones y problemas interpersonales de una manera lo más
constructiva y justa posible.
Se podría decir que es una habilidad
social de solución de conflictos entre afectados en una comunicación que, de
no resolverse asertivamente, podría llevar a una tensión conflictiva
elevada que continuara hacia consecuencias tal vez más negativas.
¿Cómo lograr ser asertivo? Nivel de
voz conversacional, mensajes en primera persona, contacto ocular directo,
respuestas directas a la situación, no dejarse llevar por las emociones o mantener
una postura erguida y firme.
El no desarrollarse adecuadamente puede
deberse a determinados modos de funcionamiento psicológico que se
pueden solucionar.
Se trata de una habilidad comunicativa
transversal, que se puede desarrollar de manera paralela a otras cuestiones de
interés solicitadas a tratar en la sesión, se trabaja de manera central o
secundaria en un proceso de mejora personal. Se requiere voluntad de aprenderla
y practicarla en el proceso para incorporarla.